26 noviembre, 2012

Alcoba del Rey, Sevilla

Cuenta la leyenda que AL-Mutamid -conocido como el rey poeta, último monarca de la dinastía de los Avadéis en Sevilla y famoso por el florecimiento cultural de la ciudad bajo su reinado de 1069 a 2091-, se enamoró perdidamente de una esclava durante uno de sus paseos, amores que culminaron con la liberación de la muchacha y un real matrimonio. Famoso fueron también los caprichos de la reina Itimad, conocida como la Rumaikiyya por ser esclava de una tal Rumiac, pero esa es otra historia…

Durante un tiempo, el amor creciente entre el rey y la esclava se mantuvo en la clandestinidad y sus encuentros secretos se celebraban en una casa contigua a la que hoy es la Basílica de la Macarena, en el barrio del mismo nombre de ciudad hispalense, un edificio que ha sido totalmente rehabilitado y en cuyo interior, además, podemos alojarnos rememorado la romántica historia, puesto que es el edificio que alberga el hotel Alcoba del Rey.

El exterior de la casa, con una elegante fachada muy característica, no os prepara para la sorpresa de aromas y colores que nos esperan en el interior. Las estancias se distribuyen alrededor de un patio mudéjar, para cuya rehabilitación se han utilizado únicamente materiales artesanales que recrearan los interiores originales; en el centro una fuente cuyo sonido es una música relajante que se escucha cuando el hotel se toma un descanso.

Alrededor del patio se reparten las quince habitaciones, cada una de ellas es única: cabeceros artesanales, camas con dosel, una cuidada iluminación y una cómoda distribución para un ambiente confortable y colorista. También alrededor del patio se encuentran las estancias comunes, recepción, salas de descanso, espacio para los desayunos, etc..

Además, Alcoba del Rey cuenta con la particularidad de ser un hotel boutique, por lo que absolutamente todos los detalles y piezas de mobiliario están a la venta, lo que le permite estar en constante renovación.

Marga G.-Chas Ocaña