El Pirineo aragonés es una zona bellísima que atrae turismo, tanto de invierno como de verano: en invierno es una zona con un gran ambiente de nieve y esquí y en verano es un sitio ideal para múltiples actividades al aires libre, asdemás de por su gran riqueza paisajística.
En Sallent de Gállego, un precioso pueblo de montaña, a más de 1.300 metros de altitud, en el Valle de Tena, se encuentra el Hotel Bocalé, una preciosa casona de montaña, muestra de la arquitectura típica de la zona, ubicada en una antigua huerta familiar.
Bocalé abrió sus puertas en el año 2000, regentado por Manolo Imaz y Elena Clavé, que ponen su toque personal en el trato a los huéspedes de este hotel, de tres estrellas, en el que domina la piedra, la madera y la pizarra.
Con confortables interiores de tipo rústico, el Bocalé tiene en su planta baja el espacio de recepción, la zona de cafetería y luminosas zonas comunes para el ocio o el descanso, como el gran salón de la entrada, con una chimenea de cobre. En las tres plantas superiores se reparten sus 21 habitaciones, la última cuenta con habitaciones abuhardilladas. Los huéspedes pueden disponer de una gran cantidad de servicios y comodidades en sus cuartos, son todas exteriores, con techos de madera y cabeceros artesanales. Para los desayunos se sirve un suculento buffet.
En el sótano cuenta con una zona de bienestar y salud, con unas termas naturales y relajantes baños de vapor, de contrastes y zona spa.
Marga G.-Chas Ocaña
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